Las Madres hemos recorrido un largo camino que se inicia un 30 de abril de 1977, en plena dictadura militar, a instancias de Azucena Villaflor de De Vincenti, cuando catorce mujeres hacen pública la desaparición forzada de sus hijos a través del accionar genocida del terrorismo de Estado.

jueves, 5 de septiembre de 2013

HOMENAJE A LAS MADRES DE PLAZA DE MAYO LÍNEA FUNDADORA

ESOS NIÑOS YA ERAN CIUDADANOS…
por Vera Jarach, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora

Fue el 24 de agosto del 2013. Un sábado soleado de invierno, en la escuela primaria Nro 75 San Ambrosio del partido bonaerense de Moreno.
La ocasión: una ceremonia festiva, de Memoria y homenaje a las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, cuyo nombre iba a serle dado.
Ocasión festiva pero mucho más que una fiesta, mucho más que un acto de homenaje. Ese algo más es lo que no solamente va a permanecer en el recuerdo de todos los que participamos, creo que quedará como una marca cívica que, paso a paso, va enraizando y fortaleciendo nuestra democracia. En los ámbitos educativos esto tiene especial relieve. Ahí, en esa escuela, el patio se convirtió ese sábado en la plaza de una pequeña ciudad, los niños, las maestras, dirigentes, educadoras, jóvenes y otras menos jóvenes, la actual directora y una que lo fue en un no tan ajeno pasado, todos estaban presentes. También el intendente y muchos invitados y, presencia especialmente aplaudida, la de los artistas. Estos últimos tenían roles especiales: el pintor del mural que, en una pared, representaba a las Madres con los blancos pañuelos en otra plaza simbólica por cierto: la Plaza de Mayo. Se descubrió una placa con la nueva titulación de la escuela. A Enriqueta y a mi nos tocó en ese momento especial junto a las autoridades. Las dos solemos manifestar algo que compartimos: esa sensación de no sentirnos para nada heroínas y no querer nunca ser puestas en un pedestal…pero ahí comprendimos (nos hicieron comprender) que tenía un fuerte significado a futuro. Dentro de 50 años – nos dijeron- alguien preguntará ¿Quiénes son estas mujeres, esa Plaza? Y se les explicará. Será evocada así la historia de nuestros Hijos, de sus luchas por un mundo mejor, más justo y solidario, la historia de una terrible dictadura cívico-militar y de cómo se pudo salir de esos trágicos años y reconquistar la democracia, la libertad y la paz. Otros artistas plásticos nos invitaron a ayudar a llenar un molde escultórico creando en hormigón dos figuras de hombre y  mujer, piedras que se van juntando para recordar y hacer recordar justamente el camino cívico hacia la realización de aquellos ideales y metas, los que fueron protagonistas y marcaron una senda, cuya meta que no vieron alcanzada desgraciadamente, ya que sus vidas fueron trucadas pero que quedó abierta y tuvo finalmente otros caminantes que le fueron poniendo jalón tras jalón. Otra emoción generalizada y a la que Enriqueta y yo tuvimos la suerte de participar. Obra colectiva y progresiva, que apunta a las etapas de ese hacer “camino al andar” y habría que agregar, a crear.
La fiesta cívica empezó con los abanderados y los himnos, con los discursos, todos muy emocionados y emocionantes. Luego los chicos y los grandes fueron protagonistas directamente en su plaza, con dos escenificaciones en las que el arte mímico y  la danza se jugaron expresando la Historia, la Memoria ya instalada. Lo que será ahí en esa escuela, en la sociedad toda, algún día la Memoria de lo No Vivido. Esa memoria que, esperamos, pueda afianzar, a través del conocimiento y el compromiso, una garantía del Nunca Más.
Los niños con algunas maestras demostraron como el Arte nace y se desarrolla desde muy temprana edad, se expresa y juega papeles esenciales justamente en la comunidad y, en ella, tiene entre otros, ese rol cívico de marcar las historias, los caminos de la humanidad. También actuó un grupo estudiantil adulto de la Universidad  de Sarmiento, evocando los años 70 y 80 del siglo pasado, los sueños y las militancias, el golpe cívico militar y sus trágicas consecuencias, las resistencias, incluyendo el movimiento de las Madres. Todo bajo un cielo maravilloso y la alegría compartida entre chicos y grandes. La escuela pasó a tener su nuevo nombre. El otro, San Ambrosio, queda como parte de un pasado de hermosa construcción social y educativa, fruto de solidaridades y voluntades que tienen que ver también con el civismo.  En mi caso tuve que mencionar una curiosa coincidencia, porque Sant´Ambrogio es el Santo de mi ciudad natal, Milán, en Italia… Cuando yo era pequeña, allá era día de fiesta, feriado, el día en que se inauguraba la temporada lírica en La Scala… Pero esta fiesta escolar en Moreno fue y va a seguir siendo en mi memoria una fiesta extraordinaria. Esos niños fueron ya ciudadanos y nosotros lo celebramos con ellos, viendo en ellos el futuro que nuestros hijos soñaron, que nosotros seguimos soñando todos unidos por la voluntad y el compromiso de convertir los sueños en realidad. Constatando las realizaciones, los logros pero también teniendo en cuenta las asignaturas pendientes de Verdad, Justicia, Memoria y Solidaridad plenas.